Ejercicio para lograr perdonar a una persona y sanarte

Se acerca otro año y con él comienza una nueva etapa de renovación y sanación, que son los principales factores que buscamos a la hora de nuevos comienzos.

Cada uno de nosotros vivimos ciertas situaciones que nos hacen crecer, ya sean positivas o negativas, pero las vivimos y no podemos evitarlas.

Algo muy común que nos sucede a todos los seres humanos, es que el paso de los años marca aspectos de nuestra personalidad que nos hace reconocer lo que queremos y lo que no queremos.

Esto se deriva en alejarnos de situaciones o personas con las que ya no podemos tener una sana relación y con las que hemos tenido ciertos roces que finalmente los hace separarse, ya sea tu ex pareja, un miembro de tu familia, algún amigo, etc.

Lo sé, es duro pensar que la vida no es color de rosa como la queremos, pero así es y es hermoso vivirla para reconocer los errores que finalmente nos hacen crecer para ser mejores personas.

Definitivamente si tú trabajas en ti y en tu salud mental y espiritual, créeme que todo lo que te rodeará será conforme lo atraigas. Es decir, si eres positiva, reconoces tus debilidades, pero aprendes a vivir con ellas, mantendrás una armonía en tu vida que te hará estar en paz y feliz.

Esto se traduce también en la capacidad para perdonarte y perdonar a las personas que te hicieron daño alguna vez.

He escuchado a varias amigas decir que guardar mucho rencor a sus ex parejas porque las engañaron o porque no fueron como creían y se sorprenden mucho cuando les digo que en mi caso, a pesar de que he tenido relaciones que terminaron por una u otra razón, no guardo rencores y al contrario, me gusta destacar lo positivo que me dejó esa persona.

¿Cómo lo he logrado? Uff… no es tan fácil, han sido procesos largos de trabajo interno y meditación. Aunque confieso que no significa que todo está perfecto en mis emociones o que soy una experta, para nada, simplemente he aprendido a canalizar y a transformar energías que no quiero en mi vida.

Sí me ha costado y hasta la fecha puedo decir que sigo trabajando en miles de aspectos personales que aún no logro resolver, pero mi intención siempre ha sido sanar y mantener mi paz.

Recuerda que es completamente normal y saludable hablar de tus emociones y aceptarlas como son. Creo que a la mayoría de las personas (me incluyo) les cuesta expresar sus emociones y mucho más las que nos ponen tristes. ¿Por qué? Quizá es algo cultural, pero así es. El punto es abrazar tus emociones, controlarlas y después dejarlas ir.

Si estás en un momento de tu vida en el que buscas perdonar a una persona que te hizo daño, lo puedes lograr trabajando en ti y decretando buena energía con un ejercicio práctico que te ayudará a sanarte.

¿Quieres hacerlo? Toma nota.

Ejercicio para lograr perdonar a una persona y sanarte

1. Escribe en una hoja de papel el nombre de la persona que quieres perdonar y escribe lo que sucedió con ella.

2. En otra hoja escribe todos los aspectos positivos que consideres que te dejó esa persona. Recuerda que sí existen, sólo debes dejar a un lado tu rencor y rascar dentro de tus pensamientos.

3. Analiza ambos aspectos, los negativos y los positivos y descubre si realmente valió la pena que lo negativo te afectara.

4. A modo de mantra o meditación escribe y luego repite:

“Yo (tu nombre) comprendo la situación que tú y yo pasamos, la cual hizo que nos alejáramos, pero entiendo que todo sucede por una razón y esto me dejó un gran aprendizaje que agradezco.

Dejo ir todas las emociones negativas que siento hacia ti y te perdono. Entiendo que no estabas en el mejor momento y por eso sucedieron así las cosas, pero te agradezco todo lo que me enseñaste.

Gracias, te dejo ir y permito que mi corazón se abra para no guardar rencores hacia ti.

Te perdono, gracias, te quiero y dejo ir mis sentimientos negativos hacia ti…”

Visualiza que estás con esa persona y que ella te escucha con atención y sonríe ante lo que le dices. Si gustas puedes cerrar los ojos para que te concentres más.

5. Para cerrar, ahora invierte los papeles y visualiza que la persona hace lo mismo contigo.

Puedes quemar las hojas de papel a modo de ritual de liberación o también puedes guardarlas para recordarte constantemente el ejercicio. Tú decides.

Cuéntame si el ejercicio te funcionó.

No te pierdas: 

Ahora Sí necesito un drink: El síndrome del perdón

Cómo perdonar una infidelidad