Ante un divorcio ¿quién se queda con el perro?

Por: Diana Jaramillo.

Sabemos que un divorcio es algo muy complicado para una pareja y uno de los conflictos más comunes a los que se pueden enfrentar es ¿con quién se queda el perro? Pues aquí te cuento como procede esa situación.

De acuerdo con el Código Civil Federal, el artículo 854 señala que “Los animales sin marca alguna que se encuentren en las propiedades, se presumen que son del dueño, mientras no se pruebe lo contrario”.

Esto quiere decir que el propietario de la mascota sería el correspondiente de quedarse con el perro, sin embargo, hay que tomar en cuenta si el matrimonio se llevó a cabo por bienes mancomunados o bienes separados.

En el régimen de bienes mancomunados lo que se adquiera después del día de matrimonio civil será propiedad de ambos esposos al 50%, sin contar lo que cada uno tenía antes de casarse.

En el caso de los bienes separados, todos los bienes que se compren después del día de matrimonio civil, serán propiedad de la persona que los adquiera, por lo que el cónyuge no participa.

Publicidad

También hay que mencionar que los bienes obtenidos antes del matrimonio siguen siendo de la persona que los compró.

Estas disposiciones se encuentran en el Código Civil Federal en el capítulo IV “Del Contrato de Matrimonio con Relación a los Bienes”.

Imagen de iStock.

Te puede interesar: ¿Cuáles son las mejores razas para niños pequeños?

¿Pero, en este caso que pasa con los perros de la pareja que se divorció?

Tomando en cuenta estas definiciones, si la pareja que se está divorciando se casó por bienes mancomunados se tendrá que negociar entre las partes afectadas con quien se quedará el perro.

Este acuerdo se puede llegar de manera amistosa, pero en caso de que no ocurra así, un Juez tendrá que intervenir para atribuir el cuidado de la mascota a uno o a ambos cónyuges, con independencia de a quien pertenezca o el dinero que haya puesto cada quien.

Ahora que si la pareja que se está divorciando se casó por bienes separados, la mascota se quedaría con el cónyuge que la haya adquirido.

Sin embargo, esa persona deberá mostrar una factura o certificado de la propiedad de esa mascota, tal y como ocurre con los bienes patrimoniales a la hora que se hace una división de bienes ante una separación.

Es importante mencionar que la persona que se quede con el perro no podrá pedir ningún tipo de pensión a su expareja.

Imagen de iStock.

Te puede interesar: Los perros captan las emociones de los dueños

Cuando una de las dos partes se queda con la mascota es completamente su responsabilidad darle techo, comida, medicinas y lo que resta de las necesidades de la mascota.

De esta forma ya sabes con quien se queda el perro. ¿A mi me lo dijo Lola y a ti?

Te recomendamos: