Violencia doméstica: ¿Qué es y cómo afecta a los integrantes de la familia?

La violencia doméstica es una realidad alarmante que afecta a una parte significativa de las familias en México. Los datos son desalentadores: según estadísticas recientes, al menos el 41.8% de las mujeres menores de edad han sufrido agresiones en sus hogares perpetradas por sus propios padres.

Aunque es difícil de aceptar, los testimonios son infinitos, y solo algunos llegan a ver la luz del sol, tal es el caso del impactante relato de la influencer Dhasia Wezka sobre su experiencia con padre o de la deportista mexicana Daniela Mejía, quien denunció que su expareja la violentó frente a su hija. Así la lista continua y cada caso que se da a conocer conmociona en redes.

¿Qué es la violencia doméstica?

La violencia doméstica se caracteriza por un patrón de comportamiento restrictivo y controlador que puede involucrar maltrato emocional, psicológico, físico, abuso sexual y/o abuso financiero.

Este comportamiento abusivo refleja el deseo de una persona de ejercer poder y control sobre su pareja o familia, utilizando conductas opresivas para mantener esa autoridad. La violencia doméstica es un delito generalizado que amenaza la vida y afecta a miles de personas independientemente de su edad, género, situación económica, raza, etnia, capacidad, religión, orientación sexual o nivel educativo.

Este patrón de maltrato busca hacer que la víctima dependa del agresor, generando miedo, confusión e inseguridad sobre su capacidad de sobrevivir por sí misma, ya sea financieramente u en otros aspectos.

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Factores que contribuyen a la violencia en el ámbito familiar

La transmisión intergeneracional de la violencia es uno de los elementos que la perpetúan, donde la crianza violenta reproduce patrones de humillación, golpes o juicios hacia los hijos, ya que así fueron educados los padres.

Abordar el origen de la violencia familiar involucra discutir el papel del patriarcado, un sistema que instaura un modelo de dominación y sumisión, donde los hombres se sitúan por encima de las mujeres en varios aspectos y esferas.

Este sistema, lamentablemente, sigue vigente generando desequilibrios de poder e inequidades en distintos ámbitos, como: cultural, político, social y económico. En este contexto, el hogar se convierte en un lugar donde la violencia puede ser una constante. Las estadísticas sugieren que es más probable que una persona sufra agresiones por parte de un miembro de su familia o dentro de su hogar en comparación con otros contextos y personas.

Impacto en el entorno familiar

De acuerdo con Women Against Abuse, las víctimas de violencia doméstica tienen mayores probabilidades de enfrentar trastornos psicológicos como depresión, ansiedad, estrés, alteraciones del sueño y trastornos alimenticios, además de padecer problemas de salud física como enfermedades cardíacas, derrames cerebrales o asma. También son más susceptibles a desarrollar adicciones a sustancias.

Los niños que son testigos de violencia doméstica tienen más probabilidad de involucrarse en relaciones abusivas cuando sean adultos, ya sea como perpetradores o víctimas. Además, estos menores suelen experimentar retrasos en su desarrollo debido al entorno violento en el que crecen.

Estadísticas alarmantes

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2021, el 70.1% de las mujeres mayores de 15 años en México han experimentado al menos un incidente de violencia en algún ámbito de su vida. La violencia psicológica prevalece como la forma más común (51.6%), seguida de la violencia sexual (49.7%), física (34.7%), económica, patrimonial o discriminación (27.4%).

Respecto a los estados con mayor prevalencia de violencia, el Estado de México lidera las estadísticas con un preocupante 78.7%, seguido por la Ciudad de México (76.2%) y Querétaro (75.2%). Por otro lado, Chiapas muestra la prevalencia más baja con un 48.7%.

¿Cómo denunciar violencia doméstica?

En situaciones de emergencia debido a la violencia, es fundamental actuar rápidamente. En el caso de México el número 911 es crucial para recibir atención a diversas formas de violencia como abuso sexual, acoso, violación o violencia familiar.

Por otro lado, los Centros de Justicia para las Mujeres (CJM) también ofrecen asistencia y apoyo. Para casos de violencia digital, el número 088 es un recurso confidencial para denuncias seguras y el sitio oficial del Gobierno de México también ofrece información adicional sobre cómo actuar ante estos casos.

La violencia intrafamiliar es una problemática que necesita ser abordada de manera urgente. La concienciación, la denuncia y la búsqueda de ayuda son pasos cruciales para erradicar este problema y brindar seguridad a quienes la padecen. Recuerda que no estás sola, la ayuda está disponible y es fundamental alzar la voz.

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