Ya hemos hablado de la hermosa relación que tiene una tía con sus sobrinos: es mágica y especial. La conexión que existe es tal, que la convierte en una segunda mamá, pero también en una amiga, confidente y protectora que velará por ellos siempre.

La tía, como una segunda mamá para sus sobrinos, es mucho más que la percepción subjetiva de unos o el deseo romántico de otros, la importancia de este elemento de familia en la vida de los niños es completamente real y hay estudios científicos que lo confirman.

La tía es una segunda madre

En esta nota te explico a detalle lo diferente que es la convivencia entre los padres y los tíos. Como papás tenemos la misión de educar, pero como tíos no tenemos esa “carga pesada”, lo que hace que podamos transmitir valores de forma más relajada y asertiva.

La tía es una amiga camuflada, una mezcla perfecta entre seguridad, confianza y diversión. Una mamá, pero sin regaños incluidos, es por eso que el apego que los niños sienten hacia ellas es muy grande.

La ciencia confirma la importancia de las tías

Laura L. Ellingson y Patty Sotirini, autoras del libro Where the aunts are: Family, feminism and kinship, analizaron y explicaron el papel de las tías en la familia y su influencia en el desarrollo de los niños.

“Las tías son capaces de proveer a los niños de recursos culturales críticos que contribuyen a la crianza, al apoyo familiar, el desarrollo personal, el conocimiento racional y la amabilidad. Son de suma importancia y a veces su papel y la influencia que tienen con sus sobrinos son pasados por alto”, explican las expertas en su texto.

La relación es benéfica tanto para los niños como para los padres. Los pequeños consiguen apoyo, estabilidad y seguridad, los padres pueden ver a sus hermanas como un soporte para aligerar un poco su carga de trabajo. Las tías por su parte, se llenan de energía, se divierten, pueden dar amor sin presión.

De acuerdo con Laura L. Ellingson y Patty Sotirini, las generaciones actuales son cada vez más reacias a tener hijos (aquí te hablo de las mujeres pank), sus planes están enfocados en la autorrealización laboral o personal, la conservación del medio ambiente e incluso las mascotas, por lo que los sobrinos son una alternativa para llenar el amor maternal (o paternal en el caso de los hombres), sin una responsabilidad permanente. Suple las necesidades de afecto, sin cambiar su rutina. El tiempo que le dedican a sus sobrinos es de calidad, porque es el tiempo que conscientemente están dispuestas a dar.

Un termómetro y sistema de alerta que puede guiar a los padres

Pero la tía, dicen las expertas, también pueden tener una función de guía, alerta y termómetro para los padres. Hay tías que llegan a conocer a sus sobrinos incluso al mismo nivel que los padres, pero también conocen a la perfección a los padres, por lo que pueden ser mediadores cuando la relación entre los hijos y sus progenitores se torna difícil.

Por si esto fuera poco, y sin traicionar la confianza de sus sobrinos, la tía puede advertir a los padres sobre las preocupaciones e inseguridades de los niños. Es un sistema de alerta confiable y objetivo, pues ve las cosas desde fuera.

Gracias a la tía, los niños también tienen la oportunidad de saber muchas cosas acerca de sus padres, sobre todo en la etapa antes de que ellos nacieran y que generalmente les genera mucha curiosidad. ¿Cómo eran sus papás de jóvenes o de niños?

Juegos, consejos, paseos, detalles, todo esto hace que las tías sean en verdad unas segundas madres.

Si tienes una hermana que es esa tía especial, agradécele el amor que tiene a tus hijos. Si tienes una tía entrañable, ¡háblale! Y si tú eres ese ser mágico, felicidades, eres una bendición para tus sobrinos.

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