Esta es la razón por la que los niños de ahora no se aburren pero sienten ansiedad

Los niños de ahora no se aburren, pero sienten ansiedad, así lo revelaron investigadores del Boston College y hoy en Me Lo Dijo Lola te compartimos cuál es la razón... 

Esta es la razón por la que los niños de ahora no se aburren pero sienten ansiedad

Hoy en día es común que los niños pasen casi todo el día en la escuela con horario extendido o, bien, los padres los inscriban a clases extracurriculares para evitar que los niños pasen tiempo de ocio, jueguen o estén "sin hacer nada", pero la falta de juego sin la dirección de un adulto, en donde los niños puedan explotar su imaginación y elegir cómo jugar ha provocado que los niños efectivamente no tengan tiempo para aburrirse, pero sufran de ansiedad. 

De acuerdo con investigadores del Boston College, los niños están cargados de actividades, en su mayoría, clases, talleres, todo bajo la guía y dirección de los adultos, que si bien les permite adquirir nuevos aprendizajes, también les impide tener tiempo de ocio y, sobre todo, tiempo para jugar de manera recreativa. 

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¿Qué es la ansiedad? 

De acuerdo con especialistas de Mayo Clinic, sentir ansiedad de modo ocasional es una parte normal de la vida. Sin embargo, las personas con trastornos de ansiedad con frecuencia tienen preocupaciones y miedos intensos, excesivos y persistentes sobre situaciones diarias.

La ansiedad causa sentimientos repentinos de miedo o terror que se intensifican en una cuestión de minutos y en algunos casos provocan ataques de pánico.

Signos y síntomas de la ansiedad

Estos son los signos y síntomas más comunes de la ansiedad, según los especialistas de Mayo Clinic: 

• Sensación de nerviosismo, agitación o tensión
• Sensación de peligro inminente, pánico o catástrofe
• Aumento del ritmo cardíaco
• Respiración acelerada 
• Sudoración
• Temblores
• Sensación de debilidad o cansancio
• Problemas para concentrarse o para pensar en otra cosa que no sea la preocupación actual
• Tener problemas para conciliar el sueño
• Padecer problemas gastrointestinales 
• Tener dificultades para controlar las preocupaciones
• Tener la necesidad de evitar las situaciones que generan ansiedad

Los niños destinan poco tiempo al juego 

Según la revista Fatherly, los niños de hoy solo juegan en promedio de 4 a 7 minutos al aire libre sin la influencia o guía de un adulto, lo que afecta su desarrollo, pues ya no aprenden o gozan de la capacidad de arrancar y elegir sus actividades para divertirse como lo que son: niños. 

“Realmente no tienen tiempo para aburrirse y realmente no tienen tiempo para iniciar sus propias actividades”, dijo Peter Gray, Ph.D. , psicólogo y profesor del Boston College.

La mayoría de los padres caen en la falsa creencia de que el hecho de que los niños jueguen solos, con libertad y bajo sus propias reglas, sin un adulto dirigiendo, es una pérdida de tiempo, lo que es totalmente falso. 

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¿La razón? De acuerdo con los investigadores del Boston College, jugar al aire libre y solos, usando la imaginación por ejemplo, es altamente benéfico para los niños, pues les brinda las bases necesarias para tomar decisiones y ser independientes. 

Padres saturan a los niños con actividades extracurriculares

El hecho de que los padres saturen de actividades extracurriculares y académicas a sus hijos y los niños prácticamente no tengan tiempo para jugar libremente repercute en su libertad, además de que causa que a la larga los niños no sepan tomar decisiones, resolver problemas y que su creatividad se vea seriamente afectada, lo que en conjunto aumenta el riesgo de que los niños sufran ansiedad, depresión y, en los casos más graves, aumente el riesgo de suicidio infantil. 

Si has notado que tu pequeño o pequeña se muestra irritable, enojado, rebelde, triste, una de las causas puede ser que está saturado de actividades y la falta de juego y aburrimiento le está generando ansiedad. 

“Parte de la razón por la que los seres humanos tienen este largo período de infancia es porque lleva tiempo aprender a tomar el control de su propia vida, decidir qué es lo que realmente quiere hacer y luego hacer que suceda. Y para todo esto está el juego. Idealmente, no debería haber adultos alrededor”, afirma Peter Gray.

Como padres, debemos velar porque nuestro hijos sean felices y jueguen libremente, exploten su imaginación, sean libres, tengan momentos de ocio y aburrimiento para explorar su creatividad y así no sean presas de la ansiedad. 

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Ahora ya sabes por qué  los niños de ahora no se aburren pero sienten ansiedad. Está en manos de los padres cuidar la salud mental de sus hijos. Si tu hijo muestra señales de ansiedad, no dudes en buscar la ayuda de un especialista. A mí Me Lo Dijo Lola y ¿a ti?