El único arrecife en el Estado de Yucatán

Abundante en naturaleza y colores mágicos, Alacranes es famoso por ser el único arrecife del estado de Yucatán, y uno de los lugares con más riqueza biológica del país. Localizado a 130km del puerto de Progreso, esta área natural protegida esta constituida por cinco islas: Isla Pérez, Isla Blanca o Chica, Isla Muertos o Desertora, Isla Pájaros e Isla Desterrada.

Decididos a conocer una de las áreas protegidas menos conocidas de México, volamos a Mérida y manejamos a Progreso. En Progreso, rentamos un barco y partimos desde la marina hacia arrecife Alacranes. El capitán y los marineros del barco prepararon una hielera con comida y bebidas, pero también nos pidieron que lleváramos una maleta con todo lo que íbamos a necesitar, ya que en la isla no encontraríamos nada más que naturaleza.

El recorrido a nuestro destino estuvo relajado, ya que las aguas en esta región son muy tranquilas. A la dos horas del viaje, el capitán detuvo las máquinas y nos dijo el lugar era excelente para pescar, y vaya que tenía razón; sacamos atunes, dorados y cananes, un pescado delicioso que habita en la zona.

Después de nuestra exitosa pesca, continuamos el trayecto, y un par de horas después, llegamos a la isla principal de este hermoso arrecife: Isla de Pérez. Mide 27 km de largo, 20 km de ancho y es conocida mundialmente por su faro, el cual fue construido en el siglo XIX por los ingleses y es el antiguo hogar del guardián de la isla.

Aparte de visitar el faro, caminar las playas y nadar en el mar azul, en Isla Pérez se puede practicar el buceo y el snorkel, ya que la variedad de fauna marina incluye delfines, ballenas, mantarrayas, tortugas y langostas. Estuvimos todo el día gozando del sol y mar hasta que se empezó a hacer de noche, y aunque nos dijeron que se puede acampar en la playa, preferimos ir a dormir al barco.

A la mañana siguiente pasamos el día tomando el sol, nadando y paseando por las islas. Lo que más nos gustó  fue que todo lo que pescábamos, los marineros nos lo cocinaban de una manera fresca, sencilla y deliciosa, agregándole un toque especial a nuestra aventura.

Después de dos días increíbles, partimos del arrecife de Alacranes y regresamos al puerto de Progreso. Nuestro viaje duro tres días y dos noches y fue uno de los mejores que hemos hecho, ya que nadie sabía que a unas horas de la costa de Yucatán podríamos encontrar uno de los arrecifes más hermosos y menos conocidos del país.
 

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