Creo que te he dicho muchas veces que soy muy fan del café, es una de mis bebidas favoritas, pero te voy a ser honesta, nunca he dejado que mis hijos lo prueben. ¿Será recomendable que los niños tomen café?

A propósito de esta inquietud me encontré una publicación del pediatra español Iván Carabaño Aguado, para el sitio Guía Infantil, quien responde algunas preguntas que toooodas nos hemos hecho:

¿Pueden tomar café los niños?

“En muchos lugares el consumo de café se inicia a edades muy tempranas. Bien es cierto que su efecto taquicardizante puede hacer que se pongan más nerviosos. Pero todo depende de la forma como lo prepare. Si se toma un café ligero, no habría inconveniente en que lo tomaran de forma controlada. El café favorece la atención”.

¿Genera adicción?

“Hay estudios que dicen que el café genera cierta dependencia, pero no está establecido firmemente. Pero si causa dependencia no se comparará con la dependencia a otras sustancias”.

¿Mejora la atención de los niños?

“Este hecho, el que el café mejore la concentración, ha sido aprovechado desde hace mucho tiempo por los estudiantes”.

¿Aumenta la frecuencia cardiaca?

“Sí, por eso hay que evitarlo en la gente que padece alteraciones cardiacas. El café eleva la frecuencia cardiaca durante pocos minutos y es un efecto reversible”

¿Es malo para el estómago?

“Es cierto que aporta cierta acidez si se consume aisladamente, pero puede ser acompañado de otros alimentos”

De forma muy controlada

Si bien el experto indica que puede ser consumido por los niños, creo que es muy importante aclarar que las recomendaciones internacionales indican que los pequeños en edad preescolar no deben ingerir más de 45 miligramos de cafeína al día (un cuarto de tacita). Es decir la clave es la moderación (muy poquito).

Ahora bien, hay que tener en cuenta que no solo el café contiene cafeína, las bebidas de cola también poseen este estimulante (que dicho sea de paso están cargadas de azúcar), así como el té, el chocolate, el helado de café y algunos analgésicos (medicamentos que ayudan al dolor). Estos productos también deben ser contabilizados dentro del límite de cafeína permitida por los niños.

En resumen, poquito no pasa nada y puede ayudarlos a concentrarse. Sin embargo,  la verdad es que a los niños no es algo que les guste por naturaleza, así que por mi parte esperaré a que crezcan para que lo prueben y decidan si les gusta o no.

No te pierdas:

¿Cómo hacer una barra de café?

¿Cómo hacer figuras de café?

¿Cómo hacer un frappé café casero?