Todo parecía “normal”, estaba en casa, viendo la televisión… cuando de pronto, un calor inexplicable recorrió todo mi cuerpo hasta sentir que, literal, “ardía por dentro”; la razón, un bochorno. ¡PERO SI A PENAS VOY PARA LOS  30!

Si estás igual que yo te debes estar preguntando, ¿por qué sucede esto si soy joven y la menopausia debería estar lejos?

Preguntando a mi ginecóloga, me explicó que los bochornos tienen diversas causas, las cuales no siempre se relacionan con nuestra vida reproductiva. 

Causas de los bochornos

1. Enfermedades cardiovasculares

La doctora me platicó que un estudio de la Universidad de Pittsburgh, en Estados Unidos, descubrió que las mujeres que experimentan sofocos a una edad temprana, tienen a un  funcionamiento endotelial atrofiado. Suena muy raro, pero se trata del sistema que regula, mantiene y controla las funciones cardiocirculatorias.

2. Origen étnico

Por otro lado también me explicó que las mujeres de ascendencia afroamericana y latina sufren un número mayor de bochornos en comparación con las de europeo; esto por un factor genético, así que esa sangre latina caliente juega en nuestra contra. 

3. Embarazo

Estos “calores” suelen ser frecuentes en el segundo y tercer trimestre de la gestación, y se caracterizan por ser más fuertes en cabeza, cuello y pecho. Me sirve para saber, porque esta causa la descarto, definitivamente no estoy otra vez embarazada, ¿o sí? (y corro a hacerme la prueba en uno, dos, tres). 

¿Cuándo consultar al médico?

Definitivamente no es normal que a temprana edad nos lleguen los bochornos, así que en cualquier caso hay que cosultar al doctor. Mucho más si son frecuentes, más de 3 en 24 horas.

¡Ojo, no te confundas! Un bochorno se caracteriza por: sensación repentina de calor, latidos de corazón rápido, mejillas ruborizadas, sudoración y sensación de frío cuando el sofoco desaparece.