¿Un Nintendo o PlayStation?: Cuál es la edad correcta para regalar su primera consola

En la era digital, la pregunta de cuándo introducir a nuestros hijos en el mundo de los videojuegos es un dilema común entre los padres modernos. ¿A qué edad es apropiado? ¿Cuáles son los beneficios y riesgos asociados?

A menudo, nos encontramos con que nuestros hijos ya están inmersos en este universo antes de que nos hagamos esa pregunta, pero ¿cómo gestionar esta introducción de manera saludable? En esta ocasión exploraremos todas tus dudas para ayudarte a tomar una decisión informada sobre cuándo es el momento adecuado para comprarle a tus hijos su primera consola de videojuegos.

¿Cómo es la clasificación de los videojuegos?

De acuerdo con el sistema PEGI (Pan European Game Information, Información Paneuropea sobre Juegos), establecido en 2003, los videojuegos se clasifican en cinco categorías de edad: más de 3 años, más de 7, más de 12, más de 16 y más de 18. Además, se proporcionan indicaciones sobre el contenido, que pueden abarcar siete tipos (lenguaje altisonante, discriminación, drogas, miedo, juego, sexo y violencia).

Este sistema es esencial para que padres y educadores determinen la facilidad de los videojuegos para sus hijos. Los fabricantes se adhieren voluntariamente a un Código Ético establecido a través de este sistema para visualizar y participar en productos de entretenimiento digital.

Las cajas de los juegos especifican las edades adecuadas y las características del contenido. Sin embargo, se recomienda supervisar el juego y, en algunos casos, participar en él para asegurarse de la experiencia que están teniendo los niños. Además, ten en cuenta que hay muchos juegos y programas disponibles en línea que pueden descargarse libremente desde internet, por lo que es crucial mantenerse alerta.

¿Qué dicen los especialistas?

La American Academy of Pediatrics (AAP) aconseja que los niños menores de 2 años eviten el tiempo frente a pantallas, y que aquellos mayores de 2 años limiten su exposición a 1 a 2 horas diarias, ya sea en televisión, videojuegos o computadoras.

Daniel Rama, neuropsicólogo y vicepresidente de la Asociación Española de Psicología del Niño y Adolescente (APSNAE), enfatiza la importancia de establecer un límite de horas para el tiempo de juego de los niños. El experto no sugiere que las dos horas sean el límite exacto, sino que sirven como una pauta general. Por lo que aconseja a los padres llegar a un acuerdo con sus hijos sobre el tiempo máximo de uso, incluso cuando se trata de videojuegos educativos, y aplicar un límite.

De acuerdo con la clasificación y recomendaciones de especialistas, se considera alrededor de los 6 años una edad adecuada para que los niños comiencen a involucrarse en el mundo de los videojuegos, siempre eligiendo aquellos apropiados para su edad.

A partir de los 4 o 5 años, se podría introducir el tema si se trata de juegos que ofrecen beneficios positivos y si los padres participan en las partidas. Antes de los 3 años, se considera que es demasiado temprano.

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Beneficios de los videojuegos

En una entrevista realizada por Eduard Punset a Daphne Bavelier, neurobióloga afiliada a las universidades de Ginebra (Suiza) y Rochester (Estados Unidos), la científica afirmó que los videojuegos tienen un impacto en la estructura cerebral.

De acuerdo con Bavelier, una de las ventajas significativas de los juegos de acción es su capacidad para mejorar la visión; sin embargo, también señaló que estos provocan modificaciones en toda la red cerebral y en el sistema de atención.

La experta explicó que el cerebro cuenta con diversas estructuras cruciales para dirigir la atención, como la corteza parietal, mantener la atención prolongadamente, como la corteza prefrontal, y suprimir elementos distractivos para evitar desconcentrarse fácilmente. Por lo que considera que el entretenimiento a través de videojuegos es una influencia positiva en diversas funciones cerebrales.

Desventajas de los videojuegos

Un exceso o un consumo inadecuado de los videojuegos puede acarrear consecuencias perjudiciales. El vicepresidente de la Asociación Española de Psicología del Niño y Adolescente (APSNAE), alerta sobre posibles disfunciones en la alimentación o el descanso, como olvidar comer o perder horas de sueño debido al juego, junto con problemas físicos relacionados con la postura y dolores de espalda.

Desde una perspectiva psicológica, esta sobreexposición puede desencadenar malestar, agresividad, trastornos disociativos que implican desconexión con la realidad, confusión entre la realidad y la fantasía, alienación social y nomofobia (miedo a estar desconectado de la red), por ello es importante mantener firme un límite de horas de juego.

Ser conscientes de las necesidades y etapas de desarrollo únicas de nuestros hijos al tomar la decisión de introducirlos en el mundo de los videojuegos es fundamental. Al entender los beneficios y riesgos te será más sencillo elegir adecuadamente la consola para tus pequeños.

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