Barefoot running o correr descalzos
Por: Ana Paula Capetillo
Cada vez que salgo a correr y alguien se fija en mis tenis, invariablemente viene la pregunta: “¿¡Corres con esooooo!? Pues sí, uso zapatillas minimalistas y soy bastante obsesionada del “barefoot running”.
Todo empezó después de leer el libro Born to Run, de Christopher McDougall. Ahí conocí un poco de la teoría de correr descalzo, y ya interesada en el tema leí unos cuantos artículos; luego conseguí un video para aprender la técnica correcta, hasta que finalmente me decidí e hice la transición a las zapatillas minimalistas. Eso sí, por ningún motivo estoy dispuesta a usar los famosos “five fingers”, pues me parecen horrorosos y ridículos; y ante todo, el estilo.
Toda la teoría gira alrededor de que en realidad los seres humanos estamos construidos para correr largas distancias; no somos muy rápidos ni tan fuertes, pero aguantamos mucho tiempo corriendo (para más detalles ver el articulo How running made us human).
Si usamos los tenis clásicos para correr, lo que estamos haciendo es modificar la forma en que lo hacemos, y perdemos sensibilidad en nuestros pies y cuerpos. Pero si dejamos que el cuerpo funcione como naturalmente lo haría, entonces nos hacemos mejores corredores. La técnica de barefoot running consiste en caer con la parte delantera o media de la planta del pie. La mayoría de los corredores caen con el talón, pero esto genera mucho estrés en el cuerpo.
ADVERTENCIA: Ésta tiene que ser una transición gradual. No intentes correr la misma distancia que antes porque te va a doler todo. Te lo digo por experiencia
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