¿Cómo protegerte de las chinches?

Las chinches tienen el cuerpo plano, de color rojizo, del tamaño de una lenteja, y han proliferado en los últimos años. Se enganchan cuando pasa un equipaje, ropa, zapatos y muebles, y se han abierto paso a casas y hoteles que nunca han tenido un encuentro con ellos.

Para mantenerlos fuera, controla lo que entra a la casa. Una manera de reducir el riesgo: evite los muebles de segunda mano. Las chinches son amantes de anidar en los pliegues y costuras de piezas tapizadas, pero también habitan en artículos que no tienen tela, tales como armarios y mesitas de noche.

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Tan pronto llegues a un hotel, es una buena idea inspeccionar la cama (los bichos evitan la luz del día, así que busca en las grietas). Guarda las bolsas en los bastidores del equipaje, y mantenlas cerradas cuando no necesites tener acceso a ellas. Cuando te vaya, revisa tus pertenencias para evitar polizones indeseables.

Los apartamentos son especialmente vulnerables a las chinches, que pueden escabullirse desde las casas de los vecinos por las grietas de los pisos o paredes. Mantén a los insectos a raya reduciendo el desorden, separando los muebles de las paredes, y revisando colchones y almohadas de vez en cuando. Y si las chinches logran entrar, llama a un exterminador con licencia especializado en el manejo integral de plagas – la forma más eficaz para eliminar a los insectos.