Mira por qué los niños franceses no hacen berrinches

Aunque no lo creas, los niños en Francia están tan bien educados que no hacen berrinches. Bueno, supongo que con sus excepciones, porque nada es blanco y negro en este mundo, pero en general son mucho más tranquilos y mejor portados.

El caso es que incluso la periodista norteamericana Pamela Druckerman, cuando se mudó a vivir a París quedó tan sorprendida al ver el comportamiento de los niños franceses que escribió un libro llamado Cómo ser una mamá cruasán. Una nueva forma de educar con sentido común, en el que descubre y comparte con sus lectores algunas reglas de crianza que, sin ser imposibles de aplicar, pueden lograr el milagro de evitar los berrinches.

Niño con lentes leyendo. Foto iStock

Algunas reglas básicas de crianza de los franceses

1. Los niños duermen en su propia cama desde bebés y los papás no corren a levantarlos al primer asomo de llanto. Evalúan la situación y sólo si el llanto es persistente acuden a ellos. Con este método, también logran que duerman de corrido toda la noche.

2. Para que los niños no sean quisquillosos para comer, desde muy pequeños sus papás les ofrecen alimentos diversos y saludables y ¡escucha esto! No hay un menú aparte para ellos en los restaurantes. Así que, o comen lo que comen sus papás, o se quedan sin comer. Además, tienen muy establecidos sus horarios de comidas, por lo que ¡jamás! les permiten un tentempié. Esto contribuye también a evitar la obesidad infantil, tan común en otros países, además de apoyarlos a cultivar la virtud de la paciencia, muy necesaria en la vida adulta.

3. En Francia los abuelos acompañan, son un apoyo, pero no crían a los niños. Los pequeños franceses siempre tienen muy en claro quiénes son sus padres y quiénes ponen las reglas.

4. A los niños franceses se les enseña desde muy pequeños a ser educados: saludar, despedirse, ceder el asiento del metro o el autobús a una persona adulta mayor, discapacitada o a una mujer embarazada. 

5. Los papás dejan a sus hijos jugar y expresarse libremente, por ejemplo, en un parque, mientras ellos platican con sus amigos, chatean en el celular o disfrutan de un picnic. Por supuesto que no los descuidan, pero jamás están encima de elos todo el tiempo. Si las reglas están claras y se establecen desde el principio, todo funciona como debe de ser.

¿Qué te han parecido estos tips de las mamás y los papás franceses para criar hijos sin berrinches?, ¿crees que podrías ponerlos en práctica con los tuyos?