Llevar a mis hijos al parque es una de mis actividades favoritas. Ellos amaaaaaan pasar el día jugando y conociendo a otros niños. Aunque no tengo un número exacto en la cabeza, te puedo decir que he visto a muchas mamás lanzarse de la resbaladilla con sus pequeños. Algo que, honestamente, jamás había considerado como malo. Hasta ahora.

¿Qué hizo que cambiara de opinión? Una imagen que me apareció en mi timeline de Facebook. A primera vista, lo que se ve en la foto me pareció normal: una mamá lanzándose de la resbaladilla con su hija. Pero, dos segundos después sentí un escalofrío recorrer todo mi cuerpo. ¡Nooooo, pobre niña!

Foto: Heather Clare/Facebook

Sí, la imagen muestra el momento exacto en el que la pierna de la pequeña se rompe.

La foto pertenece a Heather Clare, una mamá estadounidense, que decidió compartir su historia para evitar que más papás caigamos en el típico error de lanzarnos de la resbaladilla con nuestros hijos.

"Cuando Meadow tenía 12 meses (bajé con Matthew primero, pero tuvo suerte), bajé el tobogán con ella en mi regazo y su pie quedó atrapado entre mí y la resbaladilla. Esta foto es el momento en que su pierna se rompió. Ella todavía está sonriendo... porque estaba sucediendo en este momento exacto", relata Heather.

Clare cuenta que fue el médico que atendió a su pequeña en urgencias quien le comentó que las lesiones causadas por esta actividad son bastante comunes.

Espera... ¡¿qué?!

De acuerdo con el doctor Charles Jennissen, profesor clínico y médico pediátrico del personal de emergencias en la University of Iowa Carver College of Medicine, en la mayoría de los casos que ha visto, los padres no tenían ni idea de que lanzarse de la resbaladilla con sus hijos podría causarles una lesión tan grave.

Generalmente, las fracturas que se producen cuando un padre y su hijo van juntos en la resbaladilla se deben a que el zapato del niño se atora por un momento en el costado o la base del juego –justo como se ve en la imagen de Heather–.

Además, según investigadores, tu tamaño y peso pueden jugar un papel en el potencial de lesión, en comparación con el peso de tu hijo deslizándose solo. Debido a que eres más grande, el impulso hacia adelante creado al bajar la resbaladilla es mucho mayor, lo que resulta en más fuerza que puede dañar fácilmente a tu pequeño.

Entonces, aunque ya lo hayas hecho en otras ocasiones y no haya pasado nada malo, lo  mejor es que de ahora en adelante no te lances de la resbaladilla con tus hijos. ¡Por favoooooor!