La suma con los dedos, ¡muy importante!

Cuándo estaba en la escuela no faltaba el tío molestón que me dijera, ¿ya vas a empezar a sumar con los dedos? ¿te presto mi mano? ¿qué no te enseñan a contar en la escuela? Me chocaba, porque yo estaba pequeña y era la forma que utilizaba para entender los números.

Sumar con los dedos es necesario

En ese entonces no contaba con la información que hoy existe, como el estudio de Julie Betenson, de la Universidad de Bristol, publicado en la revista Frontiers in Education, en el que se asegura que contar con los dedos no solo es una ayudita para sumar sino que resulta necesario para el aprendizaje de los niños.

“Usar los dedos como representaciones de los números es parte importante del aprendizaje matemático de los niños. Es la forma como conectan representaciones verbales, simbólicas y no simbólicas”,  explica el estudio.

Desde 1940 se ha relacionado la capacidad aritmética con lo que llaman gnosia de los dedos (la capacidad del niño de representar y diferenciar cada uno de sus dedos).  Los investigadores plantean que un adecuado entrenamiento en el uso de los dedos y los juegos matemáticos, mejora la fluidez aritmética.

La explicación de esta relación es que la parte del cerebro que se activa en las operaciones numéricas está muy cercana al área del cerebro que se activa cuando el niño señala y agarra los objetos.

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Los niños que suman con los dedos NO saben menos

Son muchos los padres (y algunos docentes también, por desgracia) que creen que los niños que suman con los dedos saben menos que aquellos que pueden hacer cuentas mentalmente. Esto es una mentira, que un niño necesite los dedos no significa que su conocimiento matemático sea pobre.

Mucho más si hablamos de niños de entre 5 y 6 años de edad. La capacidad de abstracción (manejar imágenes mentales) se desarrolla con la edad, por eso los niños necesitan fichas, dados o los dedos para representar las cantidades. Es un sabio puente que construyen los niños de lo abstracto a lo concreto.

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Déjalo contar con los dedos

Por fortuna ahora sabemos la importancia de usar los dedos. Te invito a que no critiques a tu niño si los utiliza.

Por cierto, otra forma de ejercitar su pensamiento matemático es a través de juegos como el dominó (le ayuda a unir conjuntos de puntos iguales), juegos de cartas (juntan el mismo número de elementos), memorama (encontrar parejas iguales) y serpientes y escaleras (el uso del dado y avanzar por casillas es un gran ejercicio matemático).

Ahora sí, voy a contestarle al tío molestón. :D

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