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Belleza en el aire

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Cortesía de Urbangloss by Mayalen

Si hay algo que deshidrata la piel y hace que te veas tan cansada como te sientes, son los viajes largos en avión, esos en los que la opción más atractiva para que el vuelo se pase rápido es… dormir.

Es importante que consigas botellas pequeñas para que lleves contigo los productos necesarios (las venden en Sephora o en depósitos de belleza) sin que te los quiten en el área de seguridad. Recomiendo llevar a cabo estos pasos una vez que hayas cenado y estés lista para descansar. Abróchate el cinturón y saca tu kit, que no te importe si el vecino te ve con cara de asombro o te pide un algodón con agua de rosas.

Lo que necesitas:

-Bandita para el pelo y/o liga.

-Acondicionador sin enjuague para el pelo

-Discos de algodón

-Agua micelar o agua de rosas

-Toallitas desmaquillantes

-Humectante para cara

-Humectante para ojos

-Bálsamo para labios

-Gel/crema para secar granitos

-Crema para manos

Amarra el pelo. Aplica un poco de acondicionador, el Phyto 7 ($356) funciona de maravilla, el Potion 9 ($339) de Sebastian también. Hazte una colita de caballo, si esta te incomoda, usa una banda de algodón –tipo ballerina– para evitar que el pelo te toque la cara durante el vuelo.

Desmaquíllate. Es básico; a mí me gusta quitarme el rímel con toallitas desmaquillantes; la marca que tu prefieras, yo uso Garnier ($62) con esencia de rosas o las de Kirkland del Costco ($145 por 150 toallitas). Para limpiar la piel, pon un poco de agua micelar (o agua de rosas) en un algodón y pásalo por toda la cara (Vichy, $255 para piel normal; Bioderma, $239 para piel grasa o Avène, $220 para piel sensible) hasta que salga limpio.

Humecta. Ponte crema humectante en toda la cara, usa una especial para los ojos. Las muestritas de las marcas son ideales, ocupan poco espacio y no pesan. En mi último viaje llevé una de Orchidée Imperiale de Guerlain para la cara y la Contour Yeux de Cellcosmet para ojos. Es importante que esta última la apliques cada vez que puedas durante el vuelo.

Protege. Usa un buen bálsamo humectante en los labios, da igual cual uses. También hidrata las manos con tu crema favorita. La 8 Hour Cream de Elizabeth Arden ($390) sirve para boca y manos, es un must en tu bolsa de viaje.

Elimina. El día que no llevo mi Origins Spot Remover ($225), me sale un granito ­–o varios– en el avión. Ponte un poco de tu gel o crema favorita sobre la imperfección. Ahora sí, ¡a dormir!

No olvides tomar mucha agua durante todo el vuelo. Es la única manera en la que tu piel sufrirá menos las consecuencias de tantas horas en un avión. Y perdón por arruinar tu cena pero, nada de alcohol. Leíste bien: na-da. Este deshidrata las células, así que no sólo te verás muy mal, te sentirás fatal. También evita la cafeína antes de dormir.

Cuando despiertes o vayas a llegar a tu destino ve al baño a lavarte los dientes y regresa a tu lugar para empezar con la rutina “fresh”:

Repite la operación del agua micelar; súper refrescante. Aplica de nuevo tu humectante de cara y ojos. Ponte un poco de corrector en las ojeras, así como blush y gloss sobre los labios. Si llegas directo a una junta de trabajo, ponte rímel, si vas de vacaciones, seguro podrás maquillarte con calma después de bañarte. No olvides arreglarte el pelo –puedes volver a aplicar el Phyto 7– y ponerte un poco de perfume. Poquito por favor, no quieres marear a los vecinos.

Listo, haz la prueba la próxima vez que tengas un viaje largo. Comprobarás que una piel hidratada y cuidada se ve mucho mejor. ¡Disfruta tu viaje!


 

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