Amados u odiados ripped jeans

No hay mujer en este universo que al abrir su closet no pueda encontrar unos jeans, porque no, me rehúso a pensar que, aunque seas lo más lady, lo más elegante o la amante de las faldas y vestidos con todo y premio en mano, no tengas unos buenos jeans. Y esto es muy fácil de explicar, son la prenda más versátil del planeta tierra gracias a las múltiples maneras que tienes de utilizarlos, la gran variedad de tejidos que hay siempre conservando la mezclilla como el principal, las siluetas que cada temporada imponen una moda o la que simplemente, te acomoda perfecto y sienta como un guante.

Pero si te fijas en las piernas de todas las que están en algún punto del día a tu alrededor, podrás notar que varias llevan las rodillas o algo de piel al aire y eso se debe a la maravillosa tendencia que por más que dicen “ya casi se va” aquí sigue, los ripped jeans. Esto es básicamente unos pantalones que amas por como se te ven pero rasgados, rotos, deshilachados o como lo quieras llamar pero te lo digo en serio, tienes que tener unos así.

Hay muchas maneras de llevarlos y por supuesto, momentos también. La mejor manera –léase mi favorita- es con tacones no te voy a mentir, porque de esa manera haces un balance entre lo casual de los aberturas con un taconazo y ese blazer increíble, los tennis o strappy sandals también pueden hacer un buen combo para esos días de cine o comida en el parque con las amigas, son ideales siempre y cuando los sepas llevar. Sólo plis, con esto no quiero decir que a la entrevista de trabajo o la primer cena con la suegra me aparezcas con unos y lo peor, en su versión más rota, por las demás ocasiones no hay problema, serás la más cool y en onda.

PD. Y a ellos que tal se les ven… ¿Divinos no?

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