6 cosas inevitables que haces en el día de tu cumpleaños

Te arreglas mucho más de lo normal:

No sé si lo hacemos consciente o inconscientemente pero es un hecho. ¿Será que en el fondo, cumplir un año más de vida nos deprime y la forma de demostrar que no estamos viejas es viéndonos más guapas? ¿Será que queremos demostrar que lo del vino también aplica en nosotras las mujeres y que entre más viejas, nos ponemos más buenas?

“Odias” que te canten las mañanitas:

Tus compañeros de trabajo empiezan a cantarte las mañanitas y tú te pones roja como un tomate y no sabes dónde meterte. Empiezas a decir que no te gusta que te canten las mañanitas…pero en el fondo, ¡lo amas! Acéptalo.

Tu deseo ya lo tienes pensado desde el día anterior:

Cuando soplas las velas todos te dicen “pide un deseo” y tú haces la típica cara de pensativa… “mmm…¿qué pediré”. Ahórrate el show jajaja, todos sabemos que ya lo tienes pensado desde el día anterior.

Ruegas que no griten ¡mordida!:

Se te hace lo más antihigiénico del mundo meter tu boca en el pastel que todos van a comer. Aún así, no sabes por qué a todos les encanta gritar ¡MORDIDA! Y cuando por fin te convencen de hacerlo, siempre hay uno que aparece atrás tuyo como por arte de magia y te estampa la cara en el pastel.  

Tienes que responder más de 10 veces la pregunta de “¿es tu cumpleaños?”:

Aunque tengas serpentinas en tu escritorio, papel picado en la ropa, hasta un poco de pastel en tu cara por la mordida y todos te estén abrazando…nunca faltan las personas que se te acercan y te dicen “¿es tu cumpleaños?”.

Llega el final del día y te deprimes:

Se acerca el final del día y tú ya estás hasta con lagrimitas en el ojo de que TÚ día se termina y todos empiezan a decir el chiste de “aprovecha que ya sólo te falta una hora, sólo media hora, un minuto…” Y luego empieza la cuenta regresiva, tienes que esperar 365 días más para nuevamente vivir toda esta experiencia cumpleañera que tanto te gusta.