Savasana o postura del cadáver: por qué es tan importante en yoga

Si ya practicas yoga seguro recuerdas la postura de savasana o de ‘el cadáver’, esa asana que usualmente cierra la practica y que nos gustaría que durará mucho más tiempo. Hoy en Me Lo Dijo Lola te explicamos de qué se trata y por qué es tan importante.

¿Qué significa savasana?  

Savasana es una palabra que proviene del sánscrito, que es un antiguo idioma indio y la lengua clásica de la literatura hindú y las escrituras religiosas. El término savasana se compone de dos partes:

• Sava: Que en sánscrito significa "cadáver" o "muerto".
• Asana: Una palabra sánscrita que se traduce comúnmente como "postura" o "posición".

Entonces, en conjunto, savasana se traduce como la "postura del cadáver", lo que refleja la posición de relajación profunda en la que uno se encuentra durante esta parte de la práctica de yoga.

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Por qué es importante hacer savasana

La postura del cadáver o savasana es una posición de relajación profunda que se realiza al final de una sesión de yoga para ayudar al cuerpo y la mente a relajarse por completo y permitir que los beneficios de la práctica se integren.

Durante savasana, los practicantes se acuestan boca arriba en el suelo, con las piernas y los brazos ligeramente separados del cuerpo, las palmas hacia arriba y los ojos cerrados.

El objetivo principal de savasana es permitir que el cuerpo se relaje por completo y liberar cualquier tensión acumulada durante la práctica de yoga.

Durante esta posición se alienta a los practicantes a concentrarse en su respiración y a dejar que los pensamientos y preocupaciones se desvanezcan, creando un estado de calma mental y física. Esta práctica puede ayudar a reducir el estrés, mejorar la concentración y promover un mejor sueño.

Savasana es una parte importante de una sesión de yoga, ya que proporciona un espacio para la recuperación y la integración de los beneficios de las posturas y ejercicios previos. Se considera una oportunidad para desconectar y descansar profundamente antes de regresar a las actividades diarias.

Puede parece que hacer savasana es de lo más sencillo y sí, físicamente puede parecer de lo más fácil, pero en realidad calmar tus pensamientos, relajar tu mente y enfocarte en el sonido de tu respiración y en sentir tu cuerpo puede ser de lo más complicado del mudo.

Así que aunque tu práctica sea breve, te recomendamos que te tomes al menos 5 minutos para hacer savasana, relajarte y tratar de enfocar tu pensamiento en la respiración para centrar tu energía.

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