Mamás enojadas a causa del estrés y el cansancio
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Al maternar es normal sentirte enojada y cansada l iStock
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Mamás enojadas, manifiéstense. No importa si tienes uno o dos hijos, si es recién nacido o tiene 10 años, todas, en mayor o menor medida, estamos cansadas, estresadas y a su vez irritables.
Es muy fácil señalar y hasta juzgar el mal humor que tenemos todos los días pero, ¿te has preguntado qué es lo que potencia este estado de ánimo? Te daré varias pistas, quizá la falta de sueño, la poca vida social que tenemos, la carga de trabajo laboral y los quehaceres del hogar, son factores para que nos sintamos así.
No contar con una red de apoyo sólida (familia y pareja) aumenta el estrés del día a día porque las mujeres somos quienes tendemos a resolver diversos aspectos relacionados a los hijos, la casa, el trabajo y más.
Las mujeres hacen casi el triple del trabajo doméstico no remunerado en comparación con los hombres. Frecuentemente las tareas domésticas no son consideradas trabajo, aunque sean igual o incluso más laboriosas que cualquier empleo remunerado, explica The New York Times.
Las mujeres dedican más de 30 horas a la semana al trabajo doméstico, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU-Mujeres), y Colmex. ¿Habías sido consciente de esto?
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Mamás enojadas y además solteras
¿Imaginas cómo es el panorama para una madre soltera? De acuerdo con un estudio, la correlación entre el estrés parental y la actitud hacia la relación con los hijos es negativa cuando una madre cría por sí sola a su familia, es decir, a mayor estrés por parte de la mamá soltera, menor será el apoyo a los hijos, y por consiguiente la mujer sentirá menos satisfacción, reducirá su falta de compromiso, no desarrollará una buena comunicación; además de que esto repercutirá en el establecimiento de límites y mostrará poco interés en socializar.
Este mismo estudio mostró que las mujeres con educación superior, mayores de 40 años y con apoyo externo en la crianza, presentaban menos estrés. Y no solo eso, las madres con educación superior y apoyo externo presentaban actitudes positivas respecto a la crianza.
Mamás enojadas, pidan ayuda
Sabemos que sobre nosotras recaen muchas responsabilidades, sin embargo, es importante que aprendas a pedir ayuda y te apoyes en personas de confianza. Y no solo eso, es momento de que aprendas a delegar tareas, responsabilidades y decisiones. Deja que tu esposo se haga cargo de los niños y sal a caminar, permite que tu pareja vaya al súper solo y confía en que puede hacerlo porque es un adulto igual que tú.
La próxima vez que veas a mamás enojadas en lugar de criticarlas, mejor empatiza con ellas y pregunta de qué forma podrías ayudarlas a sentirse menos estresadas. Estoy segura que con solo escucharla estarás ayudando a que se sienta mucho mejor.
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